Cómo identificar un trabajo tóxico y cómo lidiar con ello

El trabajo, aunque sea en remoto va a ser la actividad a la que más tiempo dediques. A lo largo de tu trayectoria laboral es probable que en algún momento te encuentres con un empleo tóxico que afecte a tu bienestar y de ahí la necesidad de aprender a lidiar con ello.

Muchas veces puede ocurrirte que tardés un tiempo en darte cuenta porque estás ocupado intentando dejar una buena impresión. Pero, las formas en que este tipo de empleos dañinos se manifiestan son:

• Una alta rotación de personal: si ves que los compañeros con los que trabajás en remoto van cambiando constantemente, no es una buena señal.
• No hay confianza por parte del coordinador de equipo remoto: cuando este no confía en su equipo y siente la necesidad de control constante, puede aumentar el estrés de los empleados.
• Comunicación deficiente: un trabajador remoto tiene que tener siempre claro que se espera de él, desde que se incorpora a la empresa.
• No se realizan reuniones virtuales de equipo: a través de este tipo de meetings se puede mejorar el clima laboral y las relaciones entre los compañeros y jefes.
• Los beneficios van por delante de los empleados: las empresas tienen que ser rentables, pero sin olvidarse que en ellas trabajan personas. Solo prosperarán los negocios que se preocupen por los recursos humanos.
• La desconexión digital no está garantizada: si en tu empresa esperan que estés disponible a cualquier hora sin importar si estás de vacaciones, puede afectarte física y mentalmente.
• Falta de feedback positivo: esta carencia puede generar desmotivación, falta de confianza en uno mismo e incluso puede que te lleve a plantearte el seguir o no en esa empresa.
• Los compañeros no son amables entre ellos: dentro de los equipos en remoto tiene que generarse una buena relación. Estás frente a un equipo tóxico si no colaboran entre ellos, solo buscan el beneficio individual o crean rumores sobre otro integrante.

Como lidiar con un compañero tóxico

Cuando trabajás a distancia las interacciones con los compañeros no se limitan, sino que se realizan a través de herramientas digitales de comunicación sincrónica y asincrónica. Con lo cual, las posibilidades de que tengas que lidiar con un compañero tóxico son altas.

La ventaja frente a los trabajos presenciales es que, al hacer uso de estas herramientas, las conversaciones y chats pueden quedar grabados.

En cualquier caso, enfrentarte a este tipo de situaciones no es fácil. Por ello, queremos compartir con vos los siguientes consejos:

• Hablá con tu compañero honestamente.
• No te pongas a su nivel.
• Matené informado a tu superior.
• Cuidá de vos mismo. Si notás que te está afectando, no dudes en hablarlo con recursos humanos.

Es importante que identifiques la situación y actúes cuanto antes. De lo contrario, el problema podría ir creciendo hasta llegar a ser considerado como mobbing. Es decir, acoso laboral.

Mantener la motivación en un ambiente de trabajo tóxico

En estas situaciones resulta normal que sientas que no te gusta tu trabajo o que te falte energía.

Trabajar en remoto implica no tener que desplazarte a la oficina. Utilizá ese tiempo para prepararte un buen desayuno que te ayude a empezar bien el día. Intentá valorar las cosas que te gustan de ese empleo o verlo como una oportunidad para ganar experiencia y conseguir algo mejor.

También aseguráte de tener tus vías de escape. Esas cosas que te ayudan a desconectar y te hacen feliz. Hacer deporte, pasar tiempo con tus amigos o familia, etc.

Además, mantener la seguridad y la confianza en uno mismo como profesional y persona ayuda a no perder la motivación y a seguir dando lo mejor cada día.

Un ambiente de trabajo sano aumenta la productividad

Hablar sobre toxicidad en el trabajo es difícil. Muchos empleados no lo hacen por miedo a ser despedidos o ser vistos como problemáticos. Pero, nuestro consejo es que si detectás las mencionadas señales, te pongas en acción.

Por ejemplo, si ves que no se respetan tus horarios de descanso, podés apagar el celular durante la noche para retomar al día siguiente con más energía.

Un ambiente de trabajo sano hace a los empleados más felices y por tanto más productivos. Además, los clientes quedarán más satisfechos, aumentarán los beneficios para la empresa y todos salen ganando.