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La generación Z está conformada por aquellos que han nacido entre los años 1996 y 2010. Como nativos digitales, su ingreso al mundo del trabajo se dará bajo otras reglas de juego, que las empresas deben saber identificar. ¿Qué cambios introducirá esta nueva generación y por qué se dice que se tratará de un cambio sustancial?
Que los nativos digitales entienden el mundo de otra manera no es ninguna novedad. Quienes forman parte de lo que se conoce como Generación Z comenzarán ya a formar parte del mundo laboral, y esto implica nuevas maneras y dinámicas de entender el trabajo, que introducirán una serie de cambios fundamentales. Estos cambios ya comenzaron a asomarse, pero terminarán de constituirse con el ingreso de los Gen Z a sus puestos de trabajo.
El trabajo no asociado a un espacio físico
Como han nacido con el mundo ya digitalizado, los jóvenes de la Generación Z ya no conciben a la típica oficina como el sitio ideal para trabajar. Si pueden hacer lo mismo desde una computadora en cualquier lugar ¿por qué encerrarse en un sitio durante largas horas?
Esto quiere decir que las 61 millones de personas que conforman la Generación Z, piden que sus trabajos sean más flexibles y se les permita hacer actividades en otros sitios, y no necesariamente en la oficina. ¡Más puntos para el trabajo remoto!
La tecnología no reemplaza a las interacciones humanas
La fuerza de trabajo remoto irá aumentando con los años, y representará porcentajes bastante altos en los próximos años. No obstante, y pese a que quienes son parte de la Generación Z se adecúan perfectamente a trabajar bajo esta modalidad, siguen priorizando los vínculos humanos, aunque no sean “cara a cara”. Por ello, las empresas deben priorizar, si quieren empleados más productivos y creativos, fomentar estrategias comunicativas que pongan el foco en conocer a la persona, más allá de cómo trabaja. Hacer reuniones con webcams en vez de simples llamadas telefónicas, ya que es una gran manera de saber que del otro lado hay una persona que quiere ser escuchada y tenida en cuenta.
Perfiles de trabajo dinámicos
Siendo la flexibilidad uno de las características que más identifica a esta nueva fuerza de trabajo joven, es necesario saber que las personas de la Generación Z, ante un determinado puesto de trabajo, buscan darle su propia impronta. Si bien la empresa considera una serie de habilidades y destrezas, más allá de la formación, esta nueva generación es parte activa en la construcción de los perfiles de trabajo, donde les van dando forma mientras los van ejecutando: les gustan que los escuchen, proponer, dar opiniones y no simplemente recibir órdenes.
Trabajo y más vida social activa
Uno de los factores en donde más se percibe un cambio de paradigma sobre cómo se asume el trabajo, es en el deseo de tener una vida social verdaderamente de calidad, algo que no sucedía con personas que nacieron en las décadas pasadas, donde el trabajo era lo único importante. La Generación Z sabe separar muy bien su vida privada y se preocupa en encontrar un equilibrio entre ella y su trabajo: nada de tecnología los fines de semana, escapadas a la naturaleza en cuanto se puede, y nada de responder ni chequear e-mails durante vacaciones.
Las empresas y los empleadores no pueden dejar de reconocer todos estos puntos, pues serán imprescindibles cuando deban buscar nuevos perfiles para cubrir los nuevos puestos de trabajo que ya se comienzan a generar. ¿Cuál será el premio? Personas con mayor capacidad productiva, más creatividad, con un buen nivel de retroalimentación y feedback, y en especial, una mayor tolerancia al fracaso.
