Si te gusta viajar y descubrir lugares nuevos, seguramente has soñado con tener un viaje a medida, que se adapte a tus gustos, preferencias y presupuesto. Un viaje que no sea el típico paquete turístico que te lleva a los mismos lugares que a todos los demás, sino que te ofrezca experiencias únicas e inolvidables. Un viaje que te haga sentir especial y que te sorprenda en cada momento.
Ese tipo de viaje es el que puede ofrecer un diseñador de viajes. Un diseñador de viajes es un profesional que se encarga de crear viajes personalizados para cada cliente, teniendo en cuenta sus necesidades, deseos y expectativas. No es un simple agente de viajes que te vende lo que tiene en catálogo, sino que te escucha, te asesora y te propone opciones que se ajustan a lo que buscás.
Un diseñador de viajes es un experto en destinos, alojamientos, actividades y servicios que sabe cómo combinarlos para crear itinerarios únicos y originales. Este profesional acompaña durante todo el proceso de tu viaje, desde la planificación hasta el regreso, resolviendo cualquier duda o imprevisto que pueda surgir.
¿Qué ventajas tiene contratar a un diseñador de viajes?
Contratar a un diseñador de viajes tiene muchas ventajas frente a organizar el viaje por tu cuenta o comprar un paquete prefabricado. Algunas de ellas son:
Ahorrás tiempo y dinero
Un diseñador de viajes se encarga de buscar las mejores opciones para tu viaje, comparando precios, calidad y disponibilidad. Así no tenés que perder horas navegando por internet o llamando a diferentes proveedores.
Además, al tener acuerdos con distintos operadores, puede conseguirte mejores tarifas y condiciones que si reservaras directamente.
Disfrutás más y mejor
Un diseñador de viajes te ofrece experiencias que no encontrarías por tu cuenta o en una agencia convencional. Te sugiere actividades que se adaptan a tus intereses, te recomienda lugares que no salen en las guías, te reserva hoteles con encanto o te organiza visitas privadas con guías locales. Así podés aprovechar al máximo tu tiempo y tu dinero, sin perderte nada ni sufrir estrés.
Viajás con seguridad y tranquilidad
Un diseñador de viajes te garantiza la calidad y la fiabilidad de todos los servicios que contratás para tu viaje. Te proporciona toda la información y documentación necesaria para tu destino, así como asistencia 24 horas en caso de emergencia. Además, te ofrece un seguro de viaje adecuado a tus necesidades y al tipo de viaje que realizás.
¿Cómo es contratar a un diseñador de viajes?
Si querés contratar a un diseñador de viajes, lo primero que tenés que hacer, básicamente, es contactar con uno. Podés hacerlo a través de internet, buscando páginas web o redes sociales de empresas o profesionales dedicados al diseño de viajes. También podés hacerlo por recomendación de algún amigo o familiar que haya tenido una buena experiencia con alguno.
Una vez que contactes con el diseñador de viajes que te interese, tendrás que explicarle qué tipo de viaje querés hacer: cuándo querés ir, cuánto tiempo querés estar, con quién querés ir, qué presupuesto tenés y qué esperás del viaje. El diseñador de viajes te hará algunas preguntas más para conocerte mejor y saber cuáles son tus gustos y preferencias.
A partir de ahí, el diseñador empezará a trabajar en tu propuesta personalizada, la cual enviará en un plazo de unos días o, en todo caso, lo que haya pactado. La propuesta incluirá un itinerario detallado con los vuelos, los alojamientos, las actividades y los servicios que ofrece, así como el precio total del viaje. El cliente revisa la propuesta y hace los cambios que considere necesarios hasta quedar satisfecho.
Cuando esté de acuerdo con la propuesta, tendrá que confirmar la reserva y realizar el pago del viaje, según las condiciones que indique el diseñador de viajes. A partir de ese momento, el profesional se encargará de gestionar todas las reservas y de enviar la documentación y la información necesaria para el viaje. También mantendrá informado de cualquier novedad o incidencia que pueda afectar al viaje.
Finalmente, sólo quedará disfrutar del viaje y de las experiencias que ha preparado el diseñador. Durante el viaje, el cliente puede contar con su apoyo y asesoramiento en todo momento, así como con su asistencia en caso de emergencia. Al regresar, el cliente puede compartir su opinión y sus impresiones con él, así como con otras personas que puedan estar interesadas en contratar sus servicios.
Así que, ya sabés, si te apasionan los viajes y querés dedicarte a crearlos para otras personas, podés plantearte convertirte en un diseñador de viajes vos mismo. Es una profesión singular y en alza, que requiere conocimientos, creatividad y pasión por el mundo, ¿qué estás esperando?